Miguel Ángel Molina, consejero delegado de Tomarial, ha publicado un interesante artículo de opinión en Valencia Plaza en el que analiza los nuevos impuestos y medidas fiscales de 2025, destacando su impacto en un contexto de prórroga presupuestaria, inestabilidad política y los desafíos derivados de la Dana. Su reflexión subraya la importancia de una planificación fiscal adecuada para empresas y empresarios frente a un panorama en constante evolución.
Entre los puntos clave, Molina detalla la Ley 7/2024, que introduce tres nuevos impuestos:
- Impuesto complementario para multinacionales y grandes grupos nacionales, alineado con la Directiva Europea.
- Impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de entidades financieras, que sustituye al anterior gravamen temporal.
- Impuesto sobre líquidos para cigarrillos electrónicos, un impuesto especial que entra en vigor en 2025.
También destaca medidas relevantes en otros impuestos como el Impuesto sobre Sociedades, que incluye incentivos para empresas que se capitalicen y una reducción gradual del tipo para microempresas y pequeñas empresas. En el IRPF, se eleva el gravamen sobre la renta del ahorro para los tramos más altos, mientras que el IVA podría incorporar cambios en arrendamientos de viviendas de corta duración.
Molina concluye que este «año nuevo, impuestos nuevos» refuerza la necesidad de que las empresas adapten sus estrategias fiscales y presupuestarias a tiempo para afrontar los desafíos que plantea 2025.
